Papúa Nueva Guinea:
nada hay tan diferente
Toma una canoa rudimentaria para surcar el río Sepik durmiendo en palafitos
Bucea a la búsqueda de peces y de pecios
Descubre playas idílicas junto a poblaciones de tribus auténticas
Uno de los lugares más lejanos de nuestro país que no solo está lejano en kilómetros, está lejano en todo.
Papúa Nueva Guinea está en el Pacífico Sur. Pero eso no significa que sea un destino de playas maravillosas y hoteles de lujo en islas privadas. Por supuesto los hay. Sin embargo si vas allí es porque vas en busca de algo más.
Por ejemplo, volcanes. Volcanes dormidos y otros en actividad, como el de la ciudad de Rabaul, abandonada tras la erupción en 1994 y que hoy es una visita sobrecogedora e interesante.
Por ejemplo, culturas ancestrales. En esta parte del globo resisten algunas de las tribus más herméticas del mundo. En las islas Trobiand podrás conocer sus costumbres ancestrales, sus fabulosas fiestas de la cosecha, sus bailes, los colores que cubren los rostros…
Por ejemplo, subir al Monte Wilhem, el más alto de Oceanía. Un exigente trekking a través de una naturaleza tropical sensacional que acaba con una vista panorámica de kilómetros y kilómetros de costa.
Por ejemplo, llegar a la bahía de Milne para ver el entretenimiento principal, sus carreras de canoas.
Por ejemplo, rememorar la historia recorriendo algunos de los 96 km del sendero de Kokoda donde se libraron durísimos combates en la segunda guerra mundial.
Por ejemplo, recorrer en barco caudalosos ríos hasta zonas de selva y poblados donde la carretera más cercana está a cientos de kilómetros.
Y, por ejemplo, bucear en aguas ricas en especies marinas y pecios de buques japoneses y de la flota aliada hundidos durante la guerra del Pacífico
Papúa Nueva Guinea no es para todos, es para quienes buscan algo más.
Jordi Ferrer
Población
8.935.000 hab.
Capital
Puerto Moresby
Moneda
Kina
Diferencia horaria
+8 hrs.
Idioma
Inglés, tok pisin y hiri motu
Recomendaciones del viaje a Papúa Nueva Guinea
Aquí tienes cinco grandes ideas para tu viaje a Papúa Nueva Guinea,
- Un guía experto remontará ríos caudalosos hasta adentrarte en la cerrada selva y contactar con tribus de costumbres ancestrales.
- Bucear en este país es idílico. Muy pocos buceadores, muchas especies de animales y múltiples pecios de buques hundidos en la II Guerra Mundial.
- Hasta 100 tribus se juntan para celebrar la fiesta de Goroka. Colores vivos en la piel, en las máscaras, en las faldas de paja… Y siempre al son de los tambores.
- En Madang encontrarás islas espectaculares donde sentirte en el lugar más lejano del mundo. Lejano en todos los sentidos.
- Papúa te permite combinar días intensos con otros de relajación total en aguas cristalinas y playas desiertas
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